El activista Naturista (nudista-ecologista) canario que junto con Julián han contado siempre con el apoyo de la Federación Española de Naturismo y desde hace algún tiempo con el apoyo de la Fundación Internacional de Derechos Humanos, ingresará hoy día 30 de enero de 2015 en la prisión de Gran Canaria (Islas Canarias, España, Europa) para cumplir una pena de 6 meses de prisión impuesta por la jueza Mónica Oliva Gutierrez por bañarse desnudo en la playa de la capital.
Nuestro activista ha contado no sólo con el apoyo legal de la FEN, sino con la aportación voluntaria de los socios de las 15 asociaciones que integran la Federación, que han pagado también la multa de 250€ que se le impuso dada la situación de paro en la que se encuentra desde su regreso de Dinamarca. La falta de trabajo no ha impedido que nuestro amigo colabore habitualmente con el centro cívico próximo a su domicilio, cuyos vecinos se verán desde hoy privados de su simpatía y de sus clases de informática.
Quiso crear una nueva asociación Naturista en la isla que lo vio nacer desnudo, libre, natural, como siempre ha sido. Fue por ello que durante una estancia mía en abril de 2012 en la isla con motivo de una reunión del Comité Central de la Federación Naturista Internacional en Gran Canaria, tuve el placer de conocerle y apoyar su lucha acudiendo a una reunión con el Ayuntamiento y compartiendo con él un programa en una televisión local. Quién iba a pensar que sólo unas semanas después sus sueños se verían truncados por una detención ilegal mientras se bañaba en la playa, seguida de torturas y denuncias falsas.
A pesar de que la condena es de 6 meses, no haber antecedentes y haber pagado la multa aun siendo insolvente, la Jueza Mónica Oliva Gutierrez, ha dictado para hoy día 30 de enero su ingreso en prisión. Es el único caso en la reciente historia del España de alguien en prisión por disfrutar sin ropa de la playa. Los nudistas de Galicia de los 80 sólo pasaron unas horas y al final fueron condenados a una multa aplicándoles el delito de escándalo público, que sería abolido unos años después, en 1988. Todo el mundo sabe que aunque se le acuse de resistencia (¡a un pacifista!), la pena es por nudismo.
Es necesario que el CGPJ investigue este caso con urgencia para que le restituya cuanto antes la libertad y se le compense, y que se aparte a esta jueza de la judicatura, como pasó con el Juez Calamina. ¿Por qué será que basta una simple búsqueda en Internet para encontrar su apellido implicado en casos de corrupción? (caso Faycan, su padre Carmelo Oliva ex-concejal de hacienda de Telde, imputado). Los partidarios de la moral desviada que consideran al cuerpo como fuente de pecado, siempre se relajan en casos de corrupción.
Pues es un gran despropósito y merece una pronta resolución contraria y la consecuente investigación de quien lo ha propiciado.
Todo mi apoyo al nuestro amigo.
Que barbaridad. No me lo puedo creer!!!!